A pesar de ser una especie muy
atractiva para los aficionados a las aves, la peculiar y aislada población
ibérica de cigüeña negra (Ciconia nigra) sigue siendo poco
conocida. De hecho, el único censo nacional realizado en España se
remonta nada menos que al año 1987. Después sólo hay algunas
recopilaciones de información de diversas fuentes. Desde aquellas primeras
aproximaciones, la población extremeña (161-219 parejas, periodo 1995-2013) siempre ha sido la
de mayor tamaño. Le siguen Portugal, con 97-115 parejas en su censo nacional de
2004, y Andalucía, con 87 parejas en 2009, todas en Sierra Morena. Con cifras
anteriores a 2003 tenemos datos de Castilla y León (61 parejas), Castilla-La
Mancha (24) y Madrid (12). La suma de todo lo anterior, donde se mezcla un periodo muy extenso, es de 470 parejas seguras en la península Ibérica, aunque es muy
probable que la cifra real sobrepase, quizás ampliamente, las 500 parejas.
Si se tienen en cuenta los datos publicados, aparentemente la población ibérica
habría aumentado (Cano y Hernández, 2003, citaban 405 parejas seguras). Pero
como sin duda ha habido una mejor cobertura, sería más correcto considerarla
como estable. Sirva como ejemplo el caso de Andalucía, donde se pasó de
cifras de 54 (2006) y 52 parejas (1999, 2005, 2007) a 89 parejas (2009), un incremento
nada menos que del 70% en dos años, a todas luces improbable de modo natural.
Centrándonos en la población
extremeña, la gráfica inferior muestra los valores obtenidos en 17 censos
regionales que hemos conseguido recopilar. Se aprecian dos fases, una
primera entre 1973 y 1989, cuando la ornitología extremeña estaba en sus inicios
y se obtenían datos parciales, casi testimoniales. Y una segunda fase a partir
de 1993, cuando la Junta de Extremadura comenzó los censos anuales. También
ayudaron al conocimiento de la cigüeña negra los estudios
realizados por Adenex (José Luis Pérez-Chiscano, Víctor Pizarro, José A. Román, Juan J. Ferrero y otros).
La información de estos 20 años muestra una tendencia estable, con altibajos
debidos seguramente a diferencias en esfuerzo y cobertura (hay variaciones de hasta
el 21% entre años consecutivos). El máximo obtenido fue de 219 parejas en 1995,
seguido de las 195 parejas de 2011. En
2013, el censo recientemente hecho publico asciende a 189 parejas
seguras, 30 menos que el máximo de hace 20 años. Por provincias, se localizan 116 parejas en Cáceres y 73 en
Badajoz (en el año 2003 eran 101 y 82, respectivamente). Teniendo en cuenta
que todos o casi todos los censos de aves infravaloran la población real, es
muy probable que en Extremadura se superen las 200 parejas, incluso las 220.
El mapa
muestra la distribución como nidificante de la cigüeña negra en Extremadura. Se han marcado con color rojo las
áreas de mayor densidad: dehesas del suroeste de Badajoz, Monfragüe, alto y
bajo Alagón, pinares del Tiétar y algunos puntos de los ríos Tajo y Guadiana.
Esta área de ocupación se ha mantenido prácticamente inalterada desde los
primeros censos, centrándose en los riberos del río Tajo y sus afluentes, así
como en algunas áreas adehesadas y ciertas sierras.
En cuanto a la reproducción,
contamos con información de los años 2002 y 2013. En 2013 se controlaron 147
nidos donde han volado 290 pollos. Los parámetros reproductivos manejados
habitualmente son casi iguales en ambos años:
- productividad
(pollos volados por nido ocupado): 1’97 en 2013, 2’05 en 2002.
- tasa de
vuelo (pollos volados por nido con éxito): 2’45 en 2013 y 2002.
- porcentaje
de parejas que crían pollos con éxito: 82% en 2013.
Estos valores de productividad en
Extremadura son muy parecidos a la media de España (1’94) y de otro países de Europa
(1’81 en Letonia, 1’96 en Lituania) (Cano, 2012).
Un aspecto interesante de la
población ibérica de cigüeña negra es la alta proporción de nidos instalados
sobre roca. La cigüeña negra cría mayoritariamente en árboles en su amplia área
de distribución a lo largo de Eurasia, aunque haya países donde el uso de roca
sea importante (Austria 28%, Bulgaria 52%). La alejada población del sur de
África se reproduce exclusivamente en roca y la aislada de Iberia lo hace en un
55%, un 75% en el caso de Portugal. Para Extremadura se cuenta
con información detallada del sustrato de nidificación para los años 2003 y
2013 (tabla). Los nidos en roca suponen un 55%, igual en la
península Ibérica, con un uso algo mayor en 2003 que en 2013. Llama la atención
que mientras que población, área y reproducción se mantienen estables en la
última década, hay un importante cambio en la ubicación de los nidos. En
especial debido a la reducción del número de nidos en alcornoque (se pierde
un tercio), compensada con el incremento de nidos en árboles en general,
en especial en encina y pino. En cuanto a los nidos en roca, aumentan
también en cantiles fluviales, que son ahora el lugar más empleado, pero
disminuyen en roquedos serranos.
Los cambios en el uso de
sustratos de nidificación merecen un análisis profundo para determinar en que
grado afecta a la conservación tanto de la cigüeña negra como de los propios alcornocales
(¿hay ahora menos alcornoques de gran tamaño? ¿ha variado el manejo? ¿han
crecido las molestias?). En la última década se echa de menos más
información sobre conservación de la cigüeña negra. Algunos recordamos como
en 2003, en un congreso regional, Pizarro et al. citaban los siete nidos que
fueron destruidos por incendios en aquel año (3 en dehesas de Jerez, 2 en
pinares del Tiétar, 1 en Cañaveral y 1 en Sierra de San Pedro) ó como la
construcción del embalse de Alqueva supuso la pérdida de 10 nidos activos;
también comentaban que la mitad de los nidos en alcornoque sufre molestias por
el descorche, los desbroces y las podas; y cuan sensibles son a la navegación
los nidos en cortados fluviales, pues de hecho no había ninguno en tramos donde
se navegaba. Sin olvidar lo dañino de la subida del nivel de los embalses, así
en 1994 se inundaron 23 nidos y murieron 25 pollos.
Fuentes:
·
Anuarios
Ornitológicos de Extremadura. 1998-2008.
·
Informes de
Medio Ambiente en Extremadura. 2006-2012.
·
Censos
oficiales de la CMA-Junta de Andalucía.
· Cano, L. S.
2012. Biología y conservación de la
cigüeña negra en la península Ibérica. Tesis Doctoral. Universidad
Complutense de Madrid.
· Cano, L. S. y
Hernández, J. M. 2003. Cigüeña negra Ciconia nigra. En Martí, R, y del
Moral, J.C. (Eds.). Atlas de las aves reproductoras de España. MMA y
SEO/BirdLife. Madrid.
· DGMA. 2004.
The black stork in Extremadura, Southwest Spain. IV Conferencia Internacional
de cigüeña negra. Dávod-Püspökpuszta. Hungría. Abril 2004.
· Ferrero,
J.J. y Pizarro, V. M. 2003. La cigüeña negra en Extremadura. Cuadernos
Populares 61. Consejería de Cultura. Junta de Extremadura. Mérida.
· Pizarro, V.
M., Fererro, J. J. y Gil, A. 2003. Conservación de la cigüeña negra en
Extremadura. II Congreso de especies protegidas de Extremadura. 19-21 noviembre
2003. Cáceres. DGMA. Junta de Extremadura.
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