Tras un flojísimo otoño para la observación de rarezas en Extremadura, sobre todo si comparamos con el excepcional año 2012, cuando entre septiembre y diciembre se vieron varias especies de gansos raros, un pigargo europeo, un aguilucho papialbo, un mosquitero bilistado, un buitre moteado y dos correlimos canelos. En el mismo periodo de 2013 aún no nos habíamos estrenado con las rarezas... hasta el 30 de diciembre de 2013, en que Fergus Crystal encontró un archibebe patigualdo chico (Tringa flavipes) en arrozales cercanos a la localidad de Puebla de Alcollarín (Villar de Rena, Badajoz). A continuación pudieron verlo José Guerra, Marc Gálvez (fotos, leer más) y José Gómez Aparicio, quienes sugieren que podría ser un adulto; después el ave se desplazó y no pudo ser localizado de nuevo.
Se trata de la segunda observación de esta especie en Extremadura. La primera tuvo lugar hace 14 años: un probable adulto observado por Agustín Mogena el 8 de agosto de 1999 en el embalse de Valdesalor (Cáceres).
El archibebe patigualdo chico es una limícola de origen americano que cría en el ártico e inverna desde el sur de Norteamérica hasta Chile y Argentina. En España peninsular se habían homologado 57 individuos hasta el año 2011. Solamente en un caso se vieron dos ejemplares juntos, el resto fueron aves solitarias. Aunque hay citas en todos los meses del año, dominan claramente las citas otoñales (septiembre-diciembre), con un segundo pico en abril-mayo. Por regiones, también hay observaciones en toda la península y los archipiélagos canario y balear, pero con predominio de datos en el noroeste ibérico. Por tanto, sigue el patrón típico de los limícolas neárticos. De acuerdo a lo publicado, en 2013 sólo ha habido citas otoñales, a partir de agosto, de otras cinco aves en la península Ibérica: Valencia, Navarra, La Coruña y dos en el Algarve portugués (Reservoir Birds, Rare Birds in Spain).
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